¿Por qué necesitamos dormir bien?
Tenemos la costumbre de pensar que dormir durante mucho tiempo es equivalente a dormir bien. Sin embargo, nos equivocamos: para dormir bien, necesitamos que nuestro sueño sea continuo y no largo; en otras palabras, si no dormimos lo suficiente, o si lo interrumpimos constantemente, no alcanzamos todas las etapas del sueño, y si no caemos en las etapas más profundas, nuestro cuerpo no descansa.
No dormir bien tiene sus consecuencias: se nos haría difícil concentrársenos y nos veríamos más lentos en nuestros procesos mentales. Múltiples estudios sobre este tema también nos dicen que la falta de sueño nos puede llevar a tomar malas decisiones, rendir menos en el trabajo o la escuela y con mayor riesgo de sufrir accidentes de tráfico.
Por otra parte, el no dormir bien también afecta nuestro estado de ánimo. Si no descansamos lo suficiente, nos sentiremos irritables y esto podría afectar nuestras relaciones.
Lo que pasa es que las funciones de nuestro cerebro que nos ayudan a aprender y a recordar son más activas mientras dormimos. Por ello, para que podamos pensar con claridad y actuar con certeza, debemos permitir que nuestro cerebro tenga esa actividad tan importante para que éste funcione correctamente. Además, durante el sueño nuestro cuerpo produce determinadas hormonas que nos ayudan a combatir infecciones y evitar enfermedades.
Pero como dijimos al principio: el dormir bien no es lo mismo que dormir mucho. Lo que necesitamos son de 6 a 8 horas seguidas de sueño, para que nuestro cuerpo descanse correctamente; claro que, para esto, también es necesario contar con el colchón adecuado, y en El Hogar del Castor lo encontrarás.